viernes, 29 de junio de 2012

'Adam el alma única'


Cuando estamos juntos no es posible rompernos

¿Por qué cambia el egoísmo de lineal a circular? ¿Qué significa la propiedad del egoísmo circular?

Podemos imaginar el egoísmo lineal como una línea recta que consta de una multitud de puntos. El egoísmo lineal puede ver sólo el punto situado frente a sí mismo y corre hacia él como un perrito y luego corre hacia el próximo objetivo, así sucesivamente. Este no se ve ni siquiera unos pocos puntos adelante de él, porque no se preocupa por ellos. Está interesado sólo en el corto plazo, en el siguiente objetivo.
El egoísmo circular muestra un círculo, en vez del siguiente objetivo. El círculo es la eternidad, el infinito y la separación de la linealidad, incluso en la superficie. Esto se refiere a la sensación general de bienestar. Esta es la diferencia entre el egoísmo circular y el lineal dentro de nosotros.
Hoy en día, cuando la persona y el mundo entero en general se vuelven circulares e integrales, las personas experimentan la necesidad de familiarizarse con el propósito de la existencia. Sin éste, ellos serán incapaces de vivir y de avanzar. Sin este, habrá terror y muerte, porque esta vida no tiene sentido si la persona no siente el propósito superior de la vida.
El propósito superior es el siguiente peldaño al que debemos elevarnos en nuestra evolución. Sin él no nos perpetuamos después de la muerte, y esto no tiene nada que ver con religión. La oportunidad para la auto realización en el siguiente nivel en esta generalidad circular, única, le da a la persona fuerza y productividad en todo.
Sin embargo, nosotros debemos explicarle a la persona qué recibimos cuando nos volvemos integrales. Nos elevamos por encima de nosotros mismos y obtenemos el instrumento para el conocimiento, la sensibilidad y la comprensión superior. Con base en este instrumento podemos crear, escribir artículos, investigar el mundo, a nosotros mismos, nuestro propósito, y así sucesivamente.
La persona que comienza su auto-realización encuentra entre nosotros el nuevo y común "yo". Ella recibe las respuestas a todas sus preguntas, porque se convierte en un poseedor del nuevo instrumento para la adquisición de conocimientos.

De la segunda parte de la Lección Diaria de Cabalá 18/4/2012, El Zóhar

sábado, 23 de junio de 2012

LA EVOLUCIÓN de las ALMAS

Todo es alcanzado por comparación. Al comparar los atributos del Creador con los nuestros, nos damos cuenta de Su poder y de nuestra bajeza. Uno necesita estar de ese modo al tanto de Su magnificencia y Su omnipotencia. La fe significa sentir al Creador y Su Presencia.
Todas las almas pasan a través de los siguientes estados:
1.  La fase que precede su descenso a nuestro mundo.
2. La fase durante la cual son dotadas con cierta deficiencia llamada egoísmo. Esto es lo que las almas perciben como la encarnación física.
3. La fase durante la cual las almas se perciben a sí mismas y al universo espiritual completo después de la consumación final.
La fase que precede al descenso inicial del alma es llamada Olam Ein Sof, "el Mundo Sin Fin", donde las almas reciben sin límite la Luz del Creador. Después, el alma es envestida con egoísmo y desciende al Olam Ha Ze, "este mundo", en el cual su unión al mundo espiritual es remota. Allí, el alma no siente más al Creador y no percibe más su condición previa. "Este mundo" se refiere a la percepción del momento presente, o sea, la parte de la creación del Creador que percibimos por medio de nuestros órganos sensoriales. El egoísmo es colocado dentro de los sentidos.
El siguiente nivel es alcanzado al poner bajo control los órganos sensoriales, y al ser un nivel alto, lleva a una percepción de la creación más amplia. Este nivel es sentido antes del proceso de alcanzar "el mundo por venir", el mundo que percibiremos súper-sensorialmente, que es lo opuesto al "real" en el que vivimos. Cuando percibimos nuestro medio ambiente y a nosotros mismos, percibimos "este mundo". No obstante, es en el presente que empezamos a contemplar el futuro y la sensación inducida al proyectarnos al futuro, es llamada "el mundo por venir". El proceso se repite a sí mismo "el siguiente día" cuando el "mundo por venir" se convierte en "este mundo", y así sucesivamente.
Un examen atento a las escrituras de Baal HaSulam, puede ayudarnos a entender el proceso por el que atravesamos a cada momento. Por ejemplo, en lo que concierne al comportamiento espiritual del hombre, el ascenso solo puede seguir "la línea central" (el comportamiento no polarizado en uno de sus extremos.) La progresión a lo largo de esta línea central, establece la condición en la cual las Escrituras (Tora) -Creador-Israel emergen en una sola cosa. 

Rav Laitman

martes, 19 de junio de 2012

Jerusalén, la Ciudad Eterna

Extraído de Esta Tierra es Mi Tierra. Breslov
¿Qué hay de especial en Jerusalén que la llevó a ser elegida como la ciudad capital y, por extensión, el centro del universo entero? 
No hay religión importante (ni medio de comunicación), que no tenga diariamente algún reclamo sobre Jerusalén. ¿Qué es lo que la hace tan importante? El carácter único de Jerusalén data de la época de Abraham. La Torá relata que Malkitzedek, el rey de Shalem, le dio a Abraham pan y vino (Génesis 14:18-29). Rashi explica que Malkitzedek era Shem, el hijo de Noé, y que Shalem era la ciudad de Jerusalén. El pan y el vino que le dio a Abraham simbolizaban las ofrendas de grano y las libaciones de vino que los descendientes de Abraham colocarían en el Altar en el Templo de Jerusalén. Más aún, cuando D-s le ordenó a Abraham que sacrificase a Itzjak, el lugar mencionado era el Monte Moriá, el sitio del futuro Monte del Templo (Génesis 22; Bereshit Rabah 56:10). El Midrash dice lo siguiente: Abraham llamó al lugar [donde fue a sacrificar a Itzjak] irá [temor]. Shem lo llamó shalem [perfección]. Por lo tanto, declaró el Santo, bendito sea, para no menospreciar a ninguno de estos Tzadikim, su nombre será Ierushalaim, Jerusalén. De este modo, a nivel personal, Jerusalén está unida al temor a D-s. Lamitzvá básica de irat HaShem (temor reverente a D-s) se aplica en todo momento, así estemos dedicados a tareas espirituales o mundanas. A lo largo de las enseñanzas del Rebe Najmán, hay instrucciones sobre modos de aumentar el nivel del temor a D-s a través del control de los impulsos del corazón. ¿Cuál es la conexión entre el corazón y el temor a D-s?  Enseña el Rebe Najmán: La fuente del temor se encuentra en el corazón. Todos deben desarrollar este temor a D-s. 
La perfección del temor a D-s produce de hecho la construcción de Jerusalén, pues Jerusalén es IeruShalem [literalmente, "temor perfecto"] (Likutey Moharán II, 1:4). Por lo tanto IeRuShaLaiM contiene las palabras IRá , "temor" y ShaLeM , "completo" o "perfecto", aludiendo así al temor perfecto a D-s. Aquí subyace el significado profundo de Jerusalén como el lugar donde D-s está manifiesto y donde uno puede alcanzar el temor a D-s y llegar a ser consciente en todo momento de Su Majestad y Presencia.
El Rebe Najmán describe también los obstáculos para alcanzar el temor a D-s: La construcción de Jerusalén no es el único beneficio que surge del temor a D-s. "La profecía desapareció luego de la destrucción del Santo Templo" (Bava Batra 12b) y sólo retornará con la reconstrucción de Jerusalén. Dado que la fuente de la profecía es el temor a D-s, cuando el temor a D-s es perfecto, éste se eleva y se revela en el mundo. Esta cadena de eventos crea un ángel que puede producir la profecía.
Hay tres factores importantes que pueden embotar el sentimiento de temor en el corazón. Se trata de las tres pasiones principales: la avaricia, la inmoralidad y la gula. El ardiente deseo del corazón por estas tres pasiones desplaza el potencial para el temor a D-s. Para poder controlarlas, uno debe atraer Jojmá, Biná y Daat hacia el corazón. Estos tres mojín (intelectos) corresponden respectivamente a los tres tipos de pasiones en el corazón. Por lo tanto, el poder del intelecto puede ser utilizado para superar los aspectos negativos de las emociones (Likutey Moharán II, 1:4-6).
El Rebe Najmán continúa explicando que cada una de estas tres pasiones puede ser rectificada mediante una de las tres festividades de peregrinación. En la época del Éxodo, los Hijos de Israel recibieron una gran riqueza. Por lo tanto, observar las mitzvot asociadas con Pesaj puede ayudar a controlar la avaricia. Antes de la Revelación en el Monte Sinaí, los israelitas recibieron el mandamiento de abstenerse de relaciones maritales. Por lo tanto, Shavuot rectifica la inmoralidad, las transgresiones sexuales. Sukot es la época de la cosecha. Por tanto, esta festividad elimina la gula. Dado que cada festividad tiene sus características y costumbres propias, es evidente que cada una agrega un nuevo nivel de intelecto, o una nueva revelación de Divinidad. De esta manera, los tres mojín contrarrestan los efectos de los tres tipos de pasiones. Más aún, cada una de estas festividades requiere una peregrinación a Jerusalén (Deuteronomio 16:16), lo que en sí mismo ayuda a alcanzar el temor a D-s. A un nivel más profundo, subyugar estos apetitos aumenta el temor a D-s. De hecho, el corazón está unido al temor a D-s y, por lo tanto, a Jerusalén. Las pasiones impiden que el corazón alcance un temor perfecto (irá shleimá) y que la persona pueda construir Jerusalén. Controlar los deseos lleva a un corazón puro y a un temor perfecto, mediante lo cual uno puede experimentar la Divinidad y construir Jerusalén. Pues cuando Jerusalén sea construida, la Presencia de D-s les será revelada a todos  (Likutey Moharán II, 1:4). El rey David realizó grandes esfuerzos para capturar la ciudad y liberarla de la idolatría. Su ejemplo nos demuestra que Jerusalén refleja un corazón puro, libre de deseos materiales. Tal como el corazón es el centro del cuerpo, Jerusalén es el centro del Universo. De hecho, la idea de Jerusalén representa el corazón humano, el cual contiene la capacidad de manifestar la Divinidad.

Jaim kramer



domingo, 17 de junio de 2012

LOS NÚMEROS Y LA CABALA

Para la magia de la antigüedad los números contenían los elementos de todas las cosas y de todas las Ciencias. Eran un compendio del conocimiento. Concebían que para comprender la esencia de estos números debíamos recurrir no al lenguaje de los sentidos, sino sí al del Espíritu.
Los Sabios Cabalistas afirman que el gran sistema del mundo está construido sobre ciertas bases de armonía. El Ser, la forma y la acción son una consecuencia natural de estas bases.
Los números son estas bases de armonía del mundo. Conociéndolos podemos comprender las Leyes de la Naturaleza, sus relaciones, géneros y efectos mutuos. Según esta concepción los números son las bases invisibles de los Seres. Así, sus cuerpos vendrían a ser sus bases visibles.
Cada Ser del Universo tiene un principio y una forma. Estos dos extremos sólo se unen a través del número. De la misma manera que podemos ver las cualidades externas de un cuerpo, es posible que vislumbremos las cualidades invisibles de estas mismas cosas por medio de los números.
Nuestra Esencia ideal, tiene como nuestra existencia corporal, número, medida y peso, cualidades que son visibles para la inteligencia. Los números del mundo son infinitos. Pero podemos conocer su marcha de manera sencilla y directa puesto que su ritmo se marca con los números fundamentales del uno al diez.
Existen números que se corresponden con el fondo y la sustancia de los Seres, su efecto, su duración y los grados de sus progresos.
Los Cabalistas establecen una diferencia grande entre los números y las cifras. Los primeros son destinaciones y consisten solamente en las grandezas Espirituales. Las segundas sirven para contabilizar las cosas corporales.
Las grandes cantidades contienen las pequeñas de la misma forma en que se da en la naturaleza. Cada mundo superior incluye los mundos inferiores y cada mundo minúsculo forma parte de un mundo mayor.
Desde épocas remotas se les ha atribuido a ciertos números poderes misteriosos y ocultos. El uno era identificado con el carácter sublime de la Divinidad. Los seguidores de Pitágoras consideraban que el cuatro era el símbolo de la perfección. El tres estaba considerado como un número sagrado en la India, en Egipto y en Israel.
Los nórdicos consideraban de mala suerte el número 13 y todavía hoy esta cifra inspira cierto temor. El número 7 era venerado por los hebreos (los siete días de la semana, los siete brazos de su candelabro) y por los griegos (La Hidra, fabuloso monstruo derrotado por Hércules, tenía 7 cabezas). En cambio, los pueblos de Mesopotamia consideraban que el 7 era nefasto.
Los Números y las Letras del ALFABETO HEBREO
El sonido de una de las letras corresponde a una vibración que se manifiesta en un número. En esta línea de análisis cada número es un conjunto de relaciones geométricas de espacios que activan la energía.
A cada letra del alfabeto hebreo le corresponde un número. En la antigüedad los judíos, los griegos y los árabes utilizaban el mismo signo gráfico para indicar un sonido o una cantidad.
Los Cabalistas utilizan una serie de operaciones para descifrar la equivalencia entre los sonidos y los números. Las palabras se consideran como portadoras de cifras misteriosas. Los sistemas para descifrar estas equivalencias son de dos grandes tipos.
1. Los Sintéticos: cuando una sola palabra encierra en sí a otras. En este sistema se puede utilizar el desarrollo, la división o la transposición de las letras.
2. Los Idénticos: cuando una misma cosa se expresa mediante varias formas distintas de escritura.
Entre los sistemas más utilizados tenemos en primer lugar la Guematría, considerado el más elemental de todos, consiste en desplazar entre sí palabras compuestas de signos diversos, pero cuya suma es igual al mismo valor numérico.
La Guematría busca el valor numérico de la palabra, para desentramar su significado, el cual se dilucidará al encontrar el equivalente con otra palabra  cuyas letras sumarán el valor numérico de aquella.
Por ejemplo dice en el Génesis: Para saber quién es el Pacífico se suman los valores de las palabras hebreas así:   Yod=  10     Beth=   2      Aleph=   1     Schin=   300     Yod=   10     Lamed=   30      He=   5       Total =   358. 
Como la palabra  Maschiah tiene un valor numérico igual se deduce que el Pacífico será el Mesías. Otro sistema es el Notarikón, por el cual se crean palabras nuevas a partir de las letras iniciales o finales de una frase. También se puede sacar una frase de una sola palabra en sentido inverso.
Tenemos además la Temurah, por la cual se sustituye una letra por otra en función de combinaciones alfabéticas. Siguiendo este sistema se encuentra el nuevo sentido de una palabra transponiendo las letras de las que se compone o separándolas de manera que formen diferentes palabras, o sea siguiendo un procedimiento anagramático.
De esta manera tendríamos dos niveles de comprensión de los textos Sagrados: uno exotérico, que saca enseñanzas e interpretaciones de las fábulas bíblicas y otra esotérica, que incluye múltiples símbolos y nombres divinos accesibles únicamente a los iniciados.
Estos nombres ocultos, impronunciables de los demonios y de los espíritus son instrumentos mágicos. Evocándolos y conociéndolos, el cabalista puede gobernar el Universo. Por este camino se recobra la armonía perdida, el jardín del Edén del que fue expulsado el hombre.
Los números se clasifican en tres grandes grupos: el primero incluye los números simples del uno al nueve. Son los llamados pequeños números. El segundo grupo comprende los números medios, que comienzan en el diez y terminan en el 90. El tercer grupo se obtiene multiplicando las unidades por las decenas y son los denominados grandes números.
LA TRANSCRIPCIÓN
Para los que no conocen el Hebreo y no tienen perspectivas realistas de llegar a hacerlo se puede recurrir a la transcripción. Se transcribe cuando se traduce un alfabeto a otro caracterizado por utilizar sonidos diferentes.
Transcribir una lengua Sagrada a una lengua profana no es tarea fácil. Tenemos que partir de que el hebreo no tiene vocales propiamente dichas y que si las tiene estas cumplen una función meramente secundaria y accesoria y están desprovistas de valor numérico.
En todo caso muchos se han lanzado a la tarea de encontrar estas equivalencias con idiomas como el castellano, el inglés, el francés y el italiano. A continuación reproducimos las equivalentes con el castellano:
Una de las prácticas cabalísticas utilizadas hace corresponder cada una de las cifras de una fecha con la letra correspondiente, partiendo del hecho de que el calendario judío arranca desde el 3760, año de la Creación. De esta manera el año 1998 pasa a ser el año 5758.
Un ejemplo de esta manera de desentrañar significados de las fechas es la siguiente: se analiza el año 1914, año de inicio de la Primera Guerra Mundial.
 El año sería el 5674 y se sumaría así:  400+200+70+4
Esto equivaldría a las letras: Tau, Resch, Ayin, Daleth, que unidas forman la palabra hebrea Tir´ad, que significa”Matarás”. Siguiendo el mismo sistema el año 1938 se transcribe como “Tirtzach” que significa “temblarás de terror”.

Judit Ebrath